¿Se ha limpiado la lengua últimamente?

La nueva información sigue dejando muy clara la conexión entre la salud de nuestra boca y el resto del cuerpo. En consecuencia, el cuidado de los dientes y las encías pasa a ocupar un lugar más importante en la lista de prioridades de autocuidado. ¿Pero qué pasa con la lengua?

Al igual que el resto de la boca, la lengua alberga millones de bacterias que pueden provocar una cascada inflamatoria en el sistema inmunitario, puntualiza el dentista Salvador García. Mantener la lengua limpia es fundamental si quieres evitar albergar e ingerir microorganismos dañinos.

La limpieza de la lengua se practica desde hace cientos de años en el mundo oriental. Puedes reducir las bacterias destructivas de la boca limpiando tu lengua regularmente. También ayudarás a prevenir el mal aliento, la lengua recubierta, la acumulación de placa y otras condiciones perjudiciales para la salud bucal.

¿Cómo se limpia la lengua?

Tanto los cepillos de dientes como los raspadores linguales pueden eliminar las bacterias de la lengua. Muchos profesionales afirman que los raspadores linguales son la mejor herramienta que se puede utilizar y son más eficaces que el cepillo de dientes. Puedes encontrar en Internet herramientas diseñadas especialmente para este fin, pero la opción más sencilla es utilizar una cuchara.

Limpiar la lengua es tan fácil como arrastrar un utensilio metálico de punta roma por la lengua. Saca la lengua todo lo que puedas. Dirige el cuenco de la cuchara hacia la lengua y llévala hacia atrás lo más cómodamente posible. Ejerciendo una suave presión, tira de la herramienta hasta la punta de la lengua y luego aclara el limpiador lingual. Te sorprenderá la cantidad de mugre que se desprende, especialmente si no te has limpiado la lengua con regularidad. Realiza la misma acción tres o cuatro veces, luego escupe y enjuaga.

Beneficios de la limpieza de la lengua

Si te limpias la lengua cada vez que te cepillas los dientes, puedes obtener algunos beneficios importantes:

Ayuda a reducir los compuestos volátiles de azufre que causan el mal aliento. Un raspador lingual puede eliminar el 75% de estos compuestos y un cepillo de dientes puede eliminar el 45%.

Disfrutar del sabor de los alimentos. Una lengua más limpia puede alterar sus percepciones gustativas, sobre todo de la sacarosa y el ácido cítrico.

Cepillarse los dientes y limpiar la lengua con regularidad reduce los niveles de placa, lo que ayuda a promover la salud dental.

Contribuye a que la boca se sienta más fresca.

Mejora el sistema inmunitario, ya que elimina las toxinas perjudiciales, lo que le ayuda a mantenerse sano.

Lengua limpia, cuerpo sano

La lengua es la sede de las bacterias, por lo que establecer y mantener un equilibrio de microbios saludables es un paso fundamental para conseguir una mejor salud de todo el cuerpo. Tanto si utiliza un cepillo de dientes como un raspador lingual, la limpieza de esta parte de su anatomía es un complemento positivo para sus prácticas diarias de salud bucal. Examinar la lengua todos los días también le ayudará a notar si algo va mal. Si observas algún cambio inusual, no dudes en hablar con un médico o un dentista.

¿Has probado la limpieza lingual? Si es así, ¿te ha sorprendido? ¿Qué beneficios has experimentado al cultivar este hábito diario?