Incluso hoy en día, los vehículos con transmisión automática suelen consumir menos que los modelos de potencia idéntica con transmisión manual. Una de las razones es el mayor número de marchas, que permite conducir a bajas revoluciones en una gama de velocidades más amplia. Gracias a la combinación del cambio automático de ocho marchas con la función Start-Stop, el consumo de serie del BMW 530d xDrive de 258 CV es 0,6 litros inferior al del BMW 530d de 245 CV con cambio manual, a pesar de que este último tiene la tracción trasera más económica y es 75 kilogramos más ligero. ¿Vives en Almería y estás buscando cambiar de coche? Visita el concesionario de coches segunda mano Almería Crestanevada.
A pesar de estos avances, los desarrolladores no están ni mucho menos satisfechos y buscan constantemente nuevas mejoras. Por ello, en un futuro próximo, la transmisión automática también utilizará los datos del sistema de navegación para anticiparse mejor a los deseos del conductor y ajustarse en consecuencia a los requisitos esperados. Por supuesto, también se tendrá en cuenta el programa de conducción seleccionado, permitiendo una configuración tanto deportiva como confortable si se desea.
De momento, según el lenguaje oficial, el sistema está «en fase de predesarrollo» y seguramente pasará algún tiempo antes de que esté disponible en los modelos de producción, pero entonces la transmisión también tendrá en cuenta la información sobre las condiciones de la carretera, la topología de la calzada y la situación del tráfico a la hora de seleccionar su marcha para ofrecer al conductor una asistencia óptima.
Inicialmente, el control de la transmisión estará conectado en red con el sistema de navegación y el Control Dinámico de Estabilidad (DSC), pero más adelante se utilizarán también los datos de las cámaras instaladas en el vehículo y el sensor de radar del control de crucero activo. Con ayuda de los datos del sistema de navegación, la transmisión sabe, por ejemplo, lo cerrada que es una curva antes de girar y puede seleccionar una marcha adecuada para acelerar al salir de ella.
Si todos los datos fluyen hacia el control de la transmisión automática, se hace posible una selección de marchas tan inteligente como la de un conductor experimentado y previsor con una transmisión manual en una ruta que conoce, pero en todas partes y no sólo donde el conductor ya conoce su camino.